Mexicano en Alemania

En verdad aprecio que todavía se dejen comentarios en este blog. Esto me da certeza de que se le presta atención. Me encantan los comentarios que se llegan a postear aquí, y más cuando se trata de comentarios tan bien fundamentados como el que me acaban de dejar el día de hoy en uno de los posts pasados, para ser exactos, en el post del 17 de septiembre de 2011 titulado Trabajos en Alemania y mi mal humor.  Les pongo el comentario para que puedan tener una visión clara de lo que sucede en Alemania a nivel profesional, en sí, todo lo que esta persona expresó en su mensaje refleja una realidad en Alemania (el mensaje dejado por esta persona lo pondré en color morado para poder diferenciarlo con facilidad). Sólo en algunos puntos no concuerdo con él o -por lo menos- mis experiencias en este país me han indicado otra cosa. También es pecado mío por no actualizar el blog constantemente, de esta manera creo una imagen que, actualmente, no concuerda con la realidad (mi realidad, aclaro) qu

Una mañana blanca, nevó toda la noche, lo sé por haberme levantado al baño en la madrugada. Y me quedé en la ventana viendo cómo nevaba, me sigue gustando ver la nieve caer, aún no pierdo ese gusto. Uta, pero qué poca vergüenza. Aquí queda plasmado algo que me caracteriza, el ser muy inconstante: un día comienzo algo, al otro día hago algo más y total que nunca concluyo nada de lo que comienzo.  Pues bien, retomando lo de la licencia de conducir. Como bien saben, el exámen teórico lo reprobé una vez, dos veces, tres... no es cierto, sólamente dos veces reprobé el exámen, les cuento: Yo nunca había hecho un exámen de manejo, ustedes, queridos lectores, saben que en México somos tan "favor de insertar el adjetivo que más se acerque a su percepción de ser mexicano entre las comillas (sí, me refiero a las comillas entre las que está escrito este texto)" que no necesitamos de ningún exámen de manejo, basta nadamás con presentarte, pagar y listo (con pagar me refiero a pag