Basta de Mails

Entre tantos emails, saludos, despedidas, enojos, etc.... se fueron dos meses de soledad. En muchas ocasiones pasaban días sin abrir mi boca para platicar con alguien. Algunas veces paseaba, en otras me encerraba, en otras trabajaba y con esto se empezaba a concebir algo muy pequeño, algo que, a la postre, me sirvió de mucho.

Cómo era mi rutina en esos días? Nada fuera de lo común, salvo pues, que me encontraba solo.

Algo que me resulta muy gracioso era que no contaba con un reloj y, por ende, no había manera de administrar mi tiempo correctamente. Así que lo que hacía era basarme en la hora en que abrían el restaurant de Kebaps que está a la esquina de mi casa, y el cual puedo divisar desde mi ventana. Entonces, si el restaurant estaba abierto, quería decir que ya eran las nueve o más de las nueve, sabía en ese momento que debía salir de la casa para hacer mis actividades (por muchas o pocas que fueran).

A veces, por las tardes, paseaba por el río Elba; lo hacía después de buscar trabajo de manera infructuosa y de planear por horas una salida al desempleo del que estaba siendo presa. Algunos otros días rentaba una película y la veía solo en el departamento. Lo que siempre hice, y no falte nunca a hacerlo era a leer; cada vez que me recostaba a dormir por las noches, leía los libros que había traído desde México. Así pues, leí libros de Julio Cortázar, de Ernst Hemingway, logré leer toda La Biblia (algo que realmente me sorprendió o que más bien da muestra de qué tantas ganas tenía de leer), libros de diversos autores Baja Californianos, libros de teatro, etc...

De igual manera, escuchaba mi música mientras caminaba por las calles de esta ciudad tan alemanamente hermosa. Desgraciadamente, unos días después mi pequeño Mp3 comprado en Salinas y Rocha en México, dejó de funcionar, dejándome todavía más aburrido de lo que estaba.

Al final de este camino de soledad, en el cual pude reflexionar muchas cosas, planear soluciones y de encontrarme en el mismo lugar cada vez que reflexionaba o planeaba, encontré una solución, un camino que me llevaría a otra etapa en mi vida y en la cual me encuentro ahora que escribo este blog.